Hoy me reencontré con una compañera del secundario a quien no vía hacia muchísimo tiempo. Una persona de aspecto, voz y ser tierno pero que odia las demostraciones de cariño pseudo bobas, tiernas y cariñosas, una persona extraña en resumidas cuentas.
La cuestión es que reencontrarme con esta personita me hizo recordar todas las cosas que extraño de aquel colegio al que concurrí durante 5 años y hasta el día de hoy era un lugar que prefería no volver a pisar. Me recordó que entre tanta hipocresía uno puede rescatar gente que realmente vale la pena, gente a la que le gustaría seguir viendo por el resto de su vida, gente por la que uno haría algo con el simple fin de que estén un poquito mejor.
A todos aquellos que conocí en algún momento de mi vida y que la caretearon, no fueron sinceros y se encargaron de clavar puñales por la espalda, les agradezco de todo corazón hacer que valore más a aquella gente que realmente vale la pena. Y a ustedes pebetas, a ustedes 2 les agradezco sobretodo haber hecho que supere esa frustración que sentía cuando la gente se borraba en mi vida, me demostraron que por cada 10 que se borran hay uno que se queda y es un verdadero amigo.
Y a todos aquellos que no se borraron, aquellos que me aceptaron con mis aciertos y mis errores no tengo palabras para agradecerles. Sepan que cuando necesiten a alguien para que los ayude tendrán una princesa de mi parte y aquellos que les hagan mal conocerán a la perra sentada en esta computadora.
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